Estimular la mente de su perro y desafiarlo a probar cosas nuevas es una de las claves para la realización. Encontrar formas de trabajar con la naturaleza instintiva de un perro puede sacar lo mejor de él. La caminata ofrece una rutina estructurada que le permite vincularse con su perro, pero el tiempo de juego puede brindarle más oportunidades para desafiarlo, enriquecer sus vidas y establecer un vínculo aún más profundo.
Muchos propietarios piensan que «jugar» significa dejar que su cachorro corra salvajemente, pero las sesiones de juego también pueden ser productivas y divertidas con algún enfoque que permita un componente mental además del físico. Un perro juega de dos maneras: primero como perro y segundo como raza. Canalizar esa energía y conocer la diferencia es la clave para que sea una experiencia de aprendizaje positiva:
- Estimula la nariz: Todos los perros pueden rastrear usando su sentido más poderoso: su nariz. Haz un juego de esconder su comida o juega al escondite con golosinas. Puedes construir pistas de obstáculos para tu perro con cajas, contenedores resistentes y escaleras portátiles. Alienta al perro a resolver problemas y, como resultado, también generas confianza.
- Usa tu imaginación: No tienes que gastar mucho dinero en juguetes o herramientas. ¿Recuerdas cuando eras niño y construías fortalezas en el salón con sábanas, sillas y cojines de sofá? Puedes hacer lo mismo con tu perro y crear un curso de agilidad en casa. Usa golosinas para atraer al perro mediante el olor al área y la actividad que deseas que realice.
- Juega como un perro: A todos los perros les encanta correr y perseguir cosas. Esto anima al perro a concentrar la emoción y dejarte en control: cuanto más rápido vayas, más drenas su energía física; cuanto más lento vayas, más desafiarás su mente. Además, nutre su instinto de presa natural de una manera enfocada y disciplinada que es divertida para ellos y para ti.
- La disciplina también puede ser divertida: Una de las formas en que la gente suele enseñarle a un cachorro su nombre es jugar al escondite, literalmente, no solo con una golosina. Una vez que un perro ha aprendido la orden de «quedarse», este se convierte en un ejercicio realmente divertido. También es una forma de enseñar «ven» con la palabra «ven» o el sonido que elijas, por ejemplo, un silbato.
- Rétalo, pero ten en cuenta los riesgos: Con la cantidad de cuerdas y juguetes disponibles que fomentan el tira y afloja, no es sorprendente que tantos dueños de perros jueguen este juego con su mascota. Sin embargo, debes ser consciente del riesgo. Es un juego que saca al depredador de tu perro y puede ser perjudicial para tu relación si no tienes confianza y respeto para empezar. Debes tener control sobre el poder y los instintos de tu perro antes de poder participar en un juego saludable de reto con él.